Me sentí realmente genial.
-Pero que has hecho inconsciente-.
El tono de voz de Gabriel era bastante
duro, se notaba que estaba bastante enfadado y realmente nervioso.
-Yo no he hecho nada malo Gabriel-dije
con tono indiferente.
No me arrepentía ni lo más mínimo de lo
que había hecho, a veces tenía que empezar a defenderme, tenía que empezar a
hacer las cosas bien.
-No, no-dijo, casi grito con tono
irónico-solo la has metido una
ostia en la cara-.
ostia en la cara-.
Me reí por lo bajo, hacía gracia oírle
decir una palabrota pero
luego pensé.
luego pensé.
-Bueno Gabriel, tú podrías haber hecho
algo, así no tendría que
haberla pegado…-repliqué.
haberla pegado…-repliqué.
-¿Algo? ¿Algo como qué?-preguntó
nervioso.
-¡Como defenderme!-.
Por primera vez me giré y le dejé de
dar la espalda para mirarle fijamente a sus ojos aguamarina.
-Acaso…-dije en voz baja pero pronto
subí el tono-¡¿Acaso no
me podías defender?!-me di cuenta de que estaba gritando y volví
a bajar el tono a un tono bastante bajo- ¿te costaba tanto
defenderme un poquito?-.
me podías defender?!-me di cuenta de que estaba gritando y volví
a bajar el tono a un tono bastante bajo- ¿te costaba tanto
defenderme un poquito?-.
Había bajado la vista al suelo.
-solo un poquito-susurré
Me volví a girar y seguí andando, no
tenía el paso tan decidido de antes, pero me hubiera gustado.
-Mañana tenemos que reunirnos con
Raquel y Ádam, vamos a
viajar al mercado Blanco, ahí buscaremos al tercer integrante…-
su tono tampoco era tan decidido como antes.
viajar al mercado Blanco, ahí buscaremos al tercer integrante…-
su tono tampoco era tan decidido como antes.
-Bien, espero encontrar a una
amiga-sonreí.
Era la sonrisa más falsa que había
sacado en mi vida pero algo
que se me daba realmente bien era fingir, y ahora solo yo sabía
que estaba fingiendo.
que se me daba realmente bien era fingir, y ahora solo yo sabía
que estaba fingiendo.
-Bien, cuando te alias con alguien te
sale una marca en el antebrazo,
no duele, es una marca nada más-.
no duele, es una marca nada más-.
Me remangué y miré, eso ya lo tenía
antes, me había dado miedo decírselo a Gabriel, por si era una maldición o algo
parecido.
-Gabriel, esta cosa yo ya la
tenía…-dije.
-Entonces…No eres tú-.
-¿No soy el qué?-.
-Entre los 24 hay seis que tienen un
poder, cuando hacen un pacto con otro protegido el protegido adopta ese poder,
en este caso Ádam tiene
el poder y al hacer el pacto con él, tú has adquirido el poder del
agua-.
el poder y al hacer el pacto con él, tú has adquirido el poder del
agua-.
-¿Pero si alguien hace un pacto conmigo
adquiriría mi poder?-.
-Claro que sí, ahora sois dos
portadores, la cosa es que habéis hecho
un pacto sin intervención, bueno eso significa que uno de vosotros tiene
el poder de hacer un pacto sin intervención-.
un pacto sin intervención, bueno eso significa que uno de vosotros tiene
el poder de hacer un pacto sin intervención-.
-Jo, qué guay es este mundo-sentí una
punzada en el corazón al decir eso y recordé a mi familia y a mis amigos.
-¿Les recuerdas? A mí me pasaba- se
sentó en la arena- ya casi
no recuerdo la cara de mi padre aparte de esos ojos aguamarina, la belleza de mi madre, de ella solo me acuerdo de su largo y liso pelo rubio, ya casi no recuerdo su aroma a perfume de Channel-.
no recuerdo la cara de mi padre aparte de esos ojos aguamarina, la belleza de mi madre, de ella solo me acuerdo de su largo y liso pelo rubio, ya casi no recuerdo su aroma a perfume de Channel-.
-Gabriel…-susurré.
-Pero bueno, ya no importa, lo
importante es que tu todos los días recuerdes a tu familia y amigos, así no los
olvidaras-.
-Lo haré-.
Le abracé amistosamente, me tuve que
poner un poco de puntillas porque él era un poco alto.
-Venga vamos Gabriel- sonreí- ¿Qué cara
puso Raquel?-.
-Una parecida a esta-.
Le miré y me puso una cara entre el
enfado y la sorpresa, yo me reí,
él se rio y entre la nada de esa playa nuestras risas sonaron como
una sola.
él se rio y entre la nada de esa playa nuestras risas sonaron como
una sola.